Bueno, ¿qué os voy yo a contar de las croquetas con carne del cocido que hacía mi madre?, pues que para mi eran las mejores. Y digo eran por desgraciadamente ella ya no está para prepararlas a toda la familia, aunque nos enseñó a hacerlas y tanto mis hermanas como yo nos la sabemos al dedillo. Cuando ella ya estaba malita, seguía haciendo su comida y para cosas tan laboriosas como hacer la bechamel de estas croquetas, nos necesitaba de ayudantes para darle a las varillas. Ella cogía su silla de ruedas, se ponía delate de la vitro y nos decía que teníamos que ir haciendo, así es como aprendí a cocinar. Allí lo que dijese ella, había que seguirlo al pie de la letra, la verdad es que nunca he probado unas iguales, por mucho que las hacemos en casa no hay manera de ganarle el puesto a mi cocinera preferida. Estoy segura que ella se sentirá orgullosa de ver que su hija le ha puesto su nombre a la receta de sus croquetas. 

La carne que utilizaba era siempre ternera y pollo sobrante del cocido y lleva también un sofrito de cebolla rallada.

Añadir la harina, sin parar de remover para no quemarla, y cuando le hayamos dado un par de vueltas, vamos añadiendo leche, y al mismo tiempo con las varillas, vamos de forma firme y enérgica dando vueltas para que no se agarre, ni se formen grumos.

Cuando vayamos viendo que nos hacemos con la bechamel, añadimos a poquito a poco, el caldo del cocido.

Después de ligar bien la masa, incorporamos la carne, ya cortada en trocitos, y seguimos dándole a la varilla.

Añadiremos un poquito de leche, y vamos viendo como va. Parece difícil, pero es cuestión de práctica.

¿Cuándo se sabe que está en su punto?, pues vuelvo a los trucos de mi madre.......ella decía, que la masa estaba cuando empezaba a saltar y desprenderse de la sartén.

De todos modos, si veis , que no controláis la masa, y que os supera, antes de añadirle la carne, la pasáis por la batidora, la ponéis de nuevo en la sartén, añadís la carne, le dais unas vueltas........y terminada!

Ponéis la masa en una fuente, y dejáis enfriar. Yo las dejo por la noche el el frigorífico tapada con film transparente y así al día siguiente, es mas fácil envolverlas.

Le damos forma, pasamos por huevo y pan rallado, y freír en abundante aceite de oliva virgen extra.

Después dejamos sobre papel absorbente.

Con todo mi cariño, mamá...