GALLETAS DE NARANJA SANGUINA INTEGRALES

¿Puede haber algo más rico que unas galletas integrales sanotas?, y si para colmo os digo que lleva naranjas sanguinas, es lo más de lo más. Estamos en temporada de éstas naranjas tan buenas y bonitas. Me encanta esa acidez y sabor potente que tienen y si hacemos zumo el color frambuesa tan llamativo, es una preciosidad. A estas naranjas se las conoce también como naranjas rojas, naranjas de sangre o naranjas sanguinelli. Esta naranja es una de las más apreciadas por los gourmets. Fueron a los árabes a los que se acredita la plantación de ésta variedad. Los portugueses y genoveses consiguieron una variedad más dulce en el siglo XV. Es antioxidante, rica en vitamina C, ácido fólico y potasio. Contiene magnesio, calcio y vitamina A, proporcionando fibra al organismo. La harina que he utilizado es harina integral para que sean mas saludables aunque podéis hacerlas con harina blanca de trigo sin ningún problema. Venga vamos a ponernos en marcha...







Ingredientes:

● 1 huevo
● 130 gr. mantequilla a temperatura ambiente
● el zumo de 2 naranjas sanguinas
● la ralladura de una naranja sanguina
● 130 gr. azúcar
● 200 gr. harina integral
● 1 cucharadita de levadura tipo royal

Vamos a la receta...



Si la mantequilla está dura la derretimos un poquito en el microondas.

Ponemos en un recipiente el azúcar junto con la ralladura de la naranja y batimos con las varillas eléctricas.



A continuación añadimos el huevo, la mantequilla y el zumo de las naranjas y batimos.

Mezclamos la harina con la levadura y la ponemos junto a la mezcla y batimos hasta que todos los ingredientes estén bien integrados.



Metemos la mezcla tapada en el frigorifico 1 hora.

Precalentamos el horno a 200°C, calor arriba y abajo.

Con ayuda de dos cucharitas, vamos colocando montocitos sobre en una bandeja de horno con papel sulfurizado.....que estén separados por que crecen.

Metemos en el horno durante 10 minutos ....mirad cuando se pone el filito de la galleta dorado y en ese momento sacarlas.



Sacamos y colocamos sobre una rejilla hast que enfríen.

Olor y sabor de escándalo.