Crema de lombarda acompañada de jamón serrano y anacardos es la receta que os paso a explicaros aunque tiene poca dificultad. Soy una enamorada de las cremas de verduras en invierno. Me gustan en todas sus variedades, me da igual hacerla con dos verduras, que combinar tres o cuatro, según me encuentre en las existencias de casa, jeje. En esta ocasión es una crema de lombarda y patata, que lleva un sofrito de cebolla, un poquito de nata y va acompañada de jamón serrano y anacardos naturales. Tan importante es la crema como el acompañamiento, no hay cosa que me guste más que encontrarme los tropezones entre la crema, cosas mías, digo yo. La lombarda de un color morado tan característico es semejante al repollo y su color puede ser mas azulado o morado dependiendo de la acidez de la tierra. Ya era cultivada por los egipcios 2.500 años a.C. Los griegos y romanos la utilizaban tanto para cocina como para medicina, ya que con ella hacían emplastos para ciertos males. Los romanos se encargaron de llevarla por todo el Mediterráneo. Tenia tantas propiedades medicinales que se le llegó a llamar en la Alta Edad Media , el médico de los pobres, curioso, ¿verdad?. Tiene muy pocas calorías y es muy rico en fibra. Rico en vitamina C y beta carotenos. También contiene vitamina B, E y K. Todo muy bueno , salvo que a veces es pesada con el estómago, pero tomándola en crudo hace menos daño, no acompañarla de ingredientes demasiado grasientos ni condimentos fuerte. Como la acompañamos con unos taquitos de jamón serrano y unos anacardos naturales que le va genial.


Tiene un color precioso con un sabor tan rico...

Vamos a la receta...

En una olla calentamos la mantequilla y freímos la cebolla picada.

Cortamos la lombarda.

Escurrimos la lombarda y pelamos la patata.

La añadimos junto a la cebolla y junto a las patatas peladas y cortada a trozos...(aunque en la foto esté aún entera) a fuego medio durante 5 minutos y  le damos una vuelta.

Añadimos la pimienta molida y el jengibre.

Cubrimos de agua y dejamos cociendo hasta que este todo tierno.

Si cuando esté tierno todo vemos que tiene agua en exceso retiramos una poco y añadimos la nata  para dejar hirviendo 10 minutos.

Probamos y le damos el punto de sal.

Pasamos todo con la ayuda de la batidora y tenéis 2 opciones, dejarlo así o si queréis mas finita la crema, pasamos por el chino.

Decoramos con unos anacardos y jamón serrano a trocitos y una nota de color verde con unas hojas de canónigos y.....chorrito de aceite de oliva.