COSTILLAS DE CERDO EN ADOBO

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Vamos a preparar costillas de cerdo en adobo que es una preparación para tener la carne en un recipiente y tirar de ella cuando nos apetezca.

Al ser una carne que lleva ingredientes calóricos en su receta, la tendremos en el frigo para tomar de vez en cuando con una copita de vino a modo de tapa.

Las costillas adobadas se conserva estupendamente en el frigorífico y cuanto más tiempo pase más rica esta.

Es una preparación que se hacía con la carne en tiempo de matanzas y se utilizaba cuando no existían los frigoríficos.

A mi me gusta tener adobado tanto costillas como lomo de cerdo ya que cuando aparecen unos amigos tienes ahí de donde tirar y sorprender con esta receta.

A mis hijos les encantan y sobre todo el lomo en adobo les chifla en un bocata con un poco de alioli.

Paso a explicaros la receta que necesita su tiempo aunque al final merece la pena...






No me digas que no te da ganas de meter la mano y llevarte un trocito...






Ingredientes:

  • 1 kg. Costillas de cerdo
  • 8 dientes de ajo
  • 1 cucharada de tomillo
  • 1 cucharada de romero
  • 1 cucharada de orégano
  • 2 hojas de laurel
  • 1 naranja
  • 1 vaso de vino blanco
  • 1/2 vaso de vinagre
  • 1 vaso de agua
  • 2 cucharadas de pimentón dulce de la vera
  • sal
  • pimienta en grano y molida
  • aceite de oliva virgen extra
Vamos a la receta...






Salpimentamos el lomo y lo colocamos en una fuente honda

Cogemos los ajos y sin pelar le damos un golpe con la parte ancha del cuchillo, machacando uno por uno y los añadimos a la carne.

Le añadimos unos granos de pimienta, el orégano, romero, tomillo, laurel y con las manos hacemos que se impregnen de todos los aliños.

Le añadimos el vino, vinagre, pimentón dulce de la vera disuelto en el vaso del agua, el zumo de la naranja y la naranja estrujada hecha 4 trozos se la ponemos encima.

Removemos y tapamos.

Metemos en el frigorífico durante 48 horas.

Sacamos las costillas y reservamos todo el adobo para mas tarde utilizar. 





Freímos en abundante aceite de oliva virgen extra que se frían pero no se tueste.

Primero a fuego alto y luego bajamos un poquito el fuego para que se termine de hacer durante 15 minutos.






Pasado este tiempo colamos todo el aliño donde han estado las costillas y con ayuda del mazo de un mortero apretamos para que suelte todo el jugo del aliño.






Todo el caldo que ha salido se añade junto con las costillas y el aceite donde se ha frito.






Dejamos hirviendo a fuego medio hasta que se consuma el caldo y quede solo el aceite.

Aproximadamente tardará 1 hora más o menos a fuego medio.

Cuando quede solo el aceite junto con las costillas retiramos del fuego.






Lo ideal es ponerlo en una una orza o lebrillo aunque yo soy más práctica y lo meto en un recipiente de cristal hermético que dejaremos abierto hasta que enfríe para después cerrar y meter en el frigo.


Si no se cubre la carne del todo tienes que cubrirla con aceite de oliva virgen extra en crudo.

Ahí podrás tener la carne durante meses aunque te aseguro que tanto no va a durar.

¿Qué os ha parecido estas costillas adobadas?




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